Todo lo que necesitas saber sobre la piel seca y la caspa en gatos
Marina G, VeterinariaLa piel seca, con escamas y con caspa no es tan común en los gatos como en los perros, ya que los gatos son meticulosos con el cuidado de su piel. Ver caspa en los gatos es a menudo una señal de que algo va mal.
¿Sabías que los gatos pueden presentar caspa como las personas?
La piel de los gatos es un órgano increíblemente protector y puede reaccionar de muchas maneras a las agresiones, siendo habituales los cambios en su textura. Existen diversos problemas de la piel y de la salud que provocan una piel seca y escamosa en el gato, con presencia de escamas blancas en el pelaje (incluso puedes notar que quedan pequeñas escamas cuando el gato abandona tu regazo). Puede ser bastante leve y localizada o más grave, si afecta a todo el cuerpo del gato. En esta página se analizan los signos, las causas y el mejor modo de tratar la piel seca y la caspa en el pelaje de nuestros amigos felinos.
¿Qué es la caspa?
La capa más superficial de la piel, también conocida como epidermis, está compuesta principalmente por un tipo de células llamadas queratinocitos, que maduran y se diferencian en un proceso llamado queratinización. Se trata de una fase normal de la regeneración cutánea (de la piel), en la que se forman nuevas células que sustituyen a las viejas a medida que mueren y se desprenden en un ciclo continuo. Este ciclo suele durar unos 21 días en los animales domésticos.
Cuando se produce un desequilibrio en la piel, este proceso de queratinización es más rápido y las células más superficiales de la piel se desprenden en exceso, generando las escamas que comúnmente conocemos como caspa. Este trastorno se denomina seborrea seca.
Hay que tener en cuenta que la descamación moderada de la piel y la caspa no son lo mismo. El mismo ciclo continuo de renovación de la piel implica el desprendimiento normal y saludable de las células de la superficie cutánea (que a veces causa alergia a los gatos en las personas). La caspa se produce por un desprendimiento excesivo de células cutáneas debido a un desequilibrio de la piel.
¿Cómo se reconoce la seborrea seca en los gatos?
La seborrea seca en los gatos se manifiesta más a menudo como una descamación de la piel, normalmente a lo largo del lomo, aunque puede verse en zonas localizadas.
Sin embargo, debido a los meticulosos hábitos de aseo de los gatos, no siempre es fácil reconocer los signos de seborrea seca en estos animales.
Aun así, puedes observar que tu gato deja escamas de piel cuando se sienta en tu regazo o incluso en sus lugares de descanso favoritos.
Como la piel seca y la caspa suelen ser el resultado de una enfermedad subyacente, en función de la causa pueden aparecer otros signos cutáneos, como pérdida de pelo, enrojecimiento, formación de costras, picor e incluso un aspecto grasiento de la piel.
¿Qué provoca la piel seca y la caspa en gatos?
La mayoría de las veces, la piel seca y la caspa se manifiestan como una reacción de la piel a una agresión subyacente. Sin embargo, algunos gatos presentan trastornos primarios de la queratinización, que se cree que tienen un componente hereditario.
Trastornos primarios de la queratinización
Como estos trastornos son hereditarios, los gatos ya nacen con este problema y la piel seca, la caspa y el pelaje graso tienden a manifestarse pronto en su vida, normalmente en los seis primeros meses.
Se sabe, por ejemplo, que los gatos de las razas persa, himalayo y exótico de pelo corto tienen una mayor predisposición a presentar seborrea primaria idiopática y dermatitis en la cara.
Entorno del gato
Hay muchos factores ambientales que pueden acelerar la pérdida de agua de la piel, la sequedad, lo que lleva a la caspa. Los ejemplos incluyen aire seco de invierno y calefacción central que causa baja humedad del aire. Una buena dieta es óptima para la salud de la piel, por lo que una dieta deficiente también puede contribuir a la caspa. Si bañas a tu gato, te recomendamos usar un champú desarrollado para mascotas ya que bañarse con un champú inapropiado puede deshidratar la piel y provocar caspa.
Trastornos y problemas que provocan caspa y piel seca
Existen muchos problemas cutáneos o de salud general que pueden llevar a la aparición de piel escamosa en los gatos. Entre ellos se incluyen:
Parásitos
Existen varios tipos de parásitos que pueden provocar lesiones cutáneas a los gatos, ya sea por un daño directo a la piel, como es el caso de los ácaros excavadores, o por el comportamiento autolesivo del gato al intentar aliviar el picor rascándose y acicalándose.
Aunque las pulgas son, con diferencia, el parásito más común, no podemos dejar de mencionar un tipo concreto de ácaros, los del género Cheyletiella. La mayoría de los ácaros son de tamaño microscópico, pero los del género Cheyletiella son un poco más grandes y se aprecian a simple vista. Estos ácaros también se conocen como «caspa andante», por su aspecto de escamas blancas, y siempre conviene pensar en este posible diagnóstico cuando un gato presente piel escamosa, aunque no sea una afección muy común. Los gatos infestados por este ácaro también pueden padecer dermatitis miliar, que se caracteriza por la formación de pápulas y costras.
Otros parásitos que pueden causar problemas son los del género Demodex, un ácaro que vive en los folículos pilosos o en la superficie de la piel y que puede proliferar en exceso provocando lesiones cutáneas y pérdida de pelo (demodicosis felina o sarna demodéctica), y Notoedres cati, un ácaro que provoca un intenso picor que da lugar a la formación de costras y escamas en la piel (sarna), y que suele comenzar por las orejas para luego extenderse por la cabeza y el cuello.
Alergias
Aunque el principal signo de alergia en los gatos es el picor, es probable que, a continuación, y como consecuencia de este, aparezcan el rascado y el acicalamiento excesivo. Esto genera la aparición de más daños en la piel, que pueden manifestarse en forma de diversas lesiones, como pérdida de pelo, escamas grasientas de color marrón, excoriaciones y costras.
Las alergias suelen originarse como resultado de una respuesta exagerada del sistema inmunitario del gato a una partícula por lo demás inofensiva, que se denomina alérgeno. Los alérgenos pueden estar presentes en el entorno, como es el caso del polen y los ácaros del polvo, pero también en la comida de los gatos e incluso en la saliva de las pulgas.
Infecciones cutáneas
Las infecciones cutáneas suelen ser el resultado de un problema subyacente que daña la barrera protectora de la piel. Estas infecciones secundarias pueden ser bacterianas y estar relacionadas con lesiones autoinfligidas o bien ser causadas por levaduras (dermatitis por Malassezia). Es necesario identificar el problema subyacente para evitar su recurrencia.
Tiña
Los gatos (por lo general, gatos jóvenes o con la inmunidad debilitada) también pueden presentar tiña, una infección fúngica difícil de controlar en ocasiones. La manifestación de la tiña es muy variable en gatos. Se pueden encontrar lesiones cutáneas en forma de anillo, áreas alopécicas (sin pelo) de piel seca y escamosa, piel enrojecida (eritema), pápulas y costras.
Deficiencias nutricionales
Como la mayoría de los alimentos comerciales para gatos son dietas equilibradas, las deficiencias nutricionales se deben más a menudo a un problema gastrointestinal que afecta a la absorción de los nutrientes que a la calidad de la dieta en sí. Sin embargo, los alimentos bajos en grasa, normalmente recomendados para la pérdida de peso en gatos obesos, pueden provocar sequedad y descamación de la piel.
Trastornos endocrinos
El hipertiroidismo y la diabetes son las enfermedades endocrinas (hormonales) que afectan a los gatos con mayor frecuencia. Estas enfermedades pueden causar alteraciones en la elasticidad y la textura de la piel, dando lugar a sequedad y pérdida de grosor de la piel, descamación, pelo opaco y enmarañado, y pérdida de pelo, así como a signos sistémicos, que incluyen:
- Aumento de la sed y de la frecuencia de la micción
- Pérdida de peso, a pesar de un aumento del apetito
- Signos gastrointestinales, como vómitos y diarreas
Enfermedades autoinmunes y neoplásicas
Si bien en los gatos los tumores de piel se manifiestan con mayor frecuencia como un nódulo o una lesión ulcerada, los trastornos neoplásicos que no se localizan en la propia piel pueden también provocar lesiones cutáneas, como piel seca y caspa, o más a menudo un pelaje grasiento. Estas lesiones secundarias a una neoplasia no cutánea se conocen como síndrome paraneoplásico.
En los gatos que toman mucho el sol, a menudo puede observarse un enrojecimiento de la piel y descamación en la parte superior de la nariz o en la punta de las orejas, alteraciones que son debidas a daños causados por los rayos UV (quemaduras solares). Estas lesiones pueden evolucionar y convertirse en un carcinoma cutáneo de células escamosas, una neoplasia cutánea maligna muy agresiva a nivel local.
Aunque son raras, las enfermedades autoinmunes como el pénfigo (en el que el sistema inmunitario del gato ataca su propia piel) pueden causar caspa y piel seca en los gatos.
Trastornos primarios de queratinización
Como los trastornos primarios de queratinización son hereditarios, los gatos ya nacen con estos problemas, y la piel seca, la caspa y el pelaje grasiento tienden a manifestarse temprano en la vida, generalmente dentro de los primeros 6 meses.
Por ejemplo, se sabe que los gatos persas, del Himalaya y exóticos de pelo corto están predispuestos a la seborrea idiopática primaria y a una dermatitis que afecta a la cara.
¿Cuándo visitar al veterinario?
Si notas que tu gato tiene caspa y piel seca y escamosa, primero pregúntate sobre la calidad del aire y si tu gato tiene un poco de sobrepeso. Si no, y más aún, si notas otros signos como enrojecimiento, pérdida de cabello, sin ninguna relación con las condiciones ambientales, pide cita para ver a tu veterinario. Tu veterinario deberá establecer la causa de la caspa para recomendar el tratamiento más adecuado.
¿Qué puedes hacer si tu gato tiene la piel escamosa?
Productos tópicos para mejorar el estado de la piel de tu gato
La apariencia seca y escamosa de la piel del gato suele indicar que está frágil y sería conveniente hidratarla. La limpieza, la hidratación de la piel y el restablecimiento del ciclo normal de las células cutáneas son esenciales para que la piel vuelva a estar sana y recupere su función protectora.
Esto se puede conseguir aplicando productos tópicos adecuados, como los de la línea DOUXO® S3 SEB. DOUXO® S3 SEB se ha formulado cuidadosamente con ingredientes hidratantes y nutritivos que ayudan a la piel a recuperar su textura normal, sin que se produzcan más irritación y sequedad. Su ingrediente regulador del sebo, Seboliance, también ayuda a regular la producción de sebo y la formación de escamas, al tiempo que previene la proliferación excesiva de levaduras que podría producirse de forma secundaria.
Aunque a la mayoría de los gatos no les gusta la idea de bañarse con frecuencia, hemos reunido algunos consejos para ayudarte a que sea lo menos estresante posible e incluso una experiencia agradable.
DOUXO® S3 SEB está también disponible en forma de mousse, para que tu gato se beneficie de los mismos ingredientes del champú sin tener que bañarse.
Mantenimiento de una buena pauta de aseo
La mayoría de los gatos disfrutan de un tiempo de calidad con sus dueños mientras estos los asean y cepillan. Además, estas pautas son muy beneficiosas para su salud. El cepillado regular distribuye los aceites naturales de la piel de manera uniforme por todo el cuerpo, airea la piel y el pelaje, y elimina las partículas de piel muerta. Es una forma sencilla pero efectiva de ayudar a tu gato si tiene la piel seca y con caspa.
Dieta de buena calidad
Alimentar a tu gato con una dieta de alta calidad es vital para mantener su piel sana. Los ingredientes de buena calidad, incluidos los ácidos grasos esenciales, adaptados a la edad y el estado de salud del gato son fundamentales. Si tienes dudas sobre cuál es la mejor dieta para tu gato, habla con tu veterinario para que te recomiende el alimento más adecuado.
Tratamiento de la causa subyacente
Sin embargo, aunque los productos tópicos son eficaces para el tratamiento de la piel seca y escamosa en los gatos, es muy importante averiguar la razón por la que la piel ha desarrollado la seborrea y tratar la causa subyacente. Si la piel de tu gato parece seca y escamosa, no dudes en pedir una cita con tu veterinario.